Cuántas veces hemos escuchado, quiero hacer una boda diferente y al final casi todos los casamientos terminan siendo similares?
Bueno Natalí y Agustín entendieron a la perfección el concepto de «una fiesta diferente». Desde el día que me convocaron me contagiaron las ganas y el entusiasmo sobre lo que venían armando en sus cabezas, tenían dudas sobre si lo que imaginaban se podía realizar o si era un delirio, y desde ya que se pudo. Pero la gran duda era el clima, y como vemos en las fotos, el día fue el ideal, acompañó a la perfección, mejor imposible. Espero que disfruten de las fotos de esta fiesta y les sirva de inspiración a todos los que sueñan con una boda alternativa y fuera de lo común.
Fiesta: Refugio 31
Film: Memoria Emotiva